Una carta sobre las penalidades que sufrió el poeta Miguel Hernández durante su estancia en la prisión de Alicante donde finalmente falleció, escrita por su hermano Vicente Hernández, se ha incorporado al legado hernandiano que conserva el IEG en sus dependencias.
El presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes, ha hecho entrega al alcalde de Quesada, José Luis Vílchez, de la copia de esta carta escrita por del hermano de Miguel Hernández que formará parte a partir de ahora de un archivo que contiene más de 5.800 registros bibliográficos, entre manuscritos, folletos, partituras, prensa histórica o grabaciones, y también cerca de 27.000 imágenes.
En esta misiva, muy importante para conocer los últimos momentos de la vida del poeta de Orihuela, su hermano Vicente Hernández cuenta a un amigo las distintas gestiones que realizó durante la estancia de Miguel Hernández en la cárcel para que fuera atendido dado su precario estado de salud.
“Unos trámites que resultaron infructuosos y que terminaron con la muerte del poeta en una prisión donde otros muchos reclusos también padecieron unas condiciones infames” asegura el presidente del ente provincial.
El hermano explica las condiciones inhumanas en las que se encontraba el poeta al igual que otros reclusos "cuando mi hermano estaba ya con el pulmón quitado por don Antonio Barbero, estando tan malo en aquella enfermería donde habían 90 o 100 hombres tendidos quitándose las puses los unos a los otros con trapos sucios, pues allí no entraba un médico o un practicante en siete u ocho días, aquello era inhumano", reza la inédita carta.
Este documento, que incluye también su trascripción y que se ha depositado en el museo dedicado al poeta en esta localidad, es una copia del original que recientemente ha cedido al Instituto de Estudios Giennenses (IEG) Francisco Escudero, director del centro asociado de la UNED en Elche y anterior director de la Fundación Legado Literario Miguel Hernández.
Las cartas “pueden ser consultados a través de internet por todo el mundo, con lo que cumplimos con el doble compromiso que asumimos con la familia de Miguel Hernández hace una década cuando adquirimos su legado: por un lado, preservarlo y, por otro, contribuir a que su figura y su obra fueran aún más conocidos en todo el mundo”, resalta el presidente de la Diputación.
Francisco Reyes ha recordado que a lo largo de todo este año se está desarrollando un amplio programa de actividades para conmemorar el 80 aniversario de su fallecimiento.