El Alcalde de Marmolejo, Manuel Lozano, acompañado por parte de su equipo de Gobierno municipal, ha asistido a este acto y ha puesto en valor el esfuerzo económico y empresarial que ha llevado a cabo el nuevo propietario del inmueble para conseguir recuperar este mítico hotel y que la localidad cuente con más plazas hoteleras para albergar a los turistas.
Manuel Lozano ha recordado la importancia de apoyar las nuevas iniciativas empresariales privadas que vienen a sumar a la economía local y que ponen de manifiesto que el trabajo que se realiza desde las instituciones, en este caso desde el Ayuntamiento, para propiciar este tipo de inversiones da sus frutos. “Un proyecto que viene aparejado a la forma de trabajar de este pueblo: Teníamos que tener el Balneario en perfecto estado para que fuera un elemento que viniera a sumar; a sumar a alguien que cree y que se imbuye en la historia de Marmolejo”, explicaba el Alcalde marmolejeño.
La nueva dirección del Gran Hotel Balneario ha realizado una importante inversión económica para esta reapertura y, además, tal y como ha destacado Rey Bernal, a los servicios habituales de un establecimiento hotelero como son el restaurante, las habitaciones o el spa, se añade otro muy importante y que enlaza directamente con la tradición de la toma de las aguas del Balneario de Marmolejo: La consulta médica para todos aquellos clientes que deseen mejorar su salud. Para ello, el Gran Hotel Balneario cuenta con una clínica ubicada en la zona de spa que ofrece servicios de nutrición o cirugía menor, entre otras especialidades. “Queremos contribuir a que Marmolejo crezca, porque si Marmolejo crece, crecerá también el Gran Hotel Balneario”, explicaba José María Rey Bernal durante el acto de inauguración.
Este hotel está ubicado muy cerca del Balneario de Marmolejo y a tan sólo 8 minutos a pie del centro de la localidad. Cuenta con una amplia zona circundante de jardines y alberga un total de 54 habitaciones de distinto tipo y con todo tipo de comodidades, además de un comedor para más de 100 personas o una zona de restaurante-terraza llamada “Buena Esperanza” en honor a una de las fuentes del Balneario de la localidad, apto para acoger eventos o también clientes que no se alojen en el establecimiento. Su carta incluye productos de la huerta marmolejeña y los proveedores son al 90% de la localidad. Cuenta con personal laboral de Marmolejo y un spa con circuito termal, bañera de hidromasaje, masajes relajantes de distinto tipo o tratamientos con chocolate, oro o barro. Se trata del último de los 12 hoteles que abrió en Marmolejo a comienzos del siglo XX y que conserva su estructura originaria tanto en la parte exterior, como en el interior. En mayo de este mismo año, este hotel cumple 101 años desde su construcción y “poder verlo de nuevo abierto es un sueño para los marmolejeños y marmolejeñas que tanto cariño le tienen”, incidía el Alcalde, Manuel Lozano.