El delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en Jaén, Jesús Estrella, ha asistido a la puesta en marcha de la planta fotovoltaica de la Comunidad de Regantes Santa María Magdalena, en Mengíbar, acompañado por el delegado de Economía, Hacienda, Fondos Europeos, Industria, Energía y Minas, Javier Calvente, y la delegada de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Soledad Aranda, así como por el presidente de la Comunidad de Regantes, Eduardo Díaz.
Esta iniciativa de la Comunidad de Regantes, que ha supuesto un coste de 4,2 millones de euros, nació por la necesidad de reducir costes energéticos, dada la distancia entre las dos balsas de regulación que abastecen los riegos de la zona. El delegado del Gobierno ha expresado la “felicitación y el agradecimiento a la Comunidad de Regantes Santa María Magdalena por convertirse en punta de lanza en modernización e innovación, incorporando estas dos características a la producción agrícola”.
La planta fotovoltaica, con una superficie de 9 hectáreas compuestas por 9.300 módulos de 445W, va a permitir, como ha explicado Jesús Estrella, “utilizar el sol para regar el olivar pero también poder vender energía, contribuyendo con ello a la sostenibilidad ambiental y a la eficiencia energética, reduciendo costes y siendo más competitivos en el mercado del aceite”. En este sentido, el delegado del Gobierno ha identificado esta iniciativa con la hoja de ruta marcada por el Gobierno de la Junta de Andalucía a la hora de consolidar un modelo productivo que sea sostenible y que busque la eficiencia energética: “es importante buscar herramientas e iniciativas como esta que cumplan con la economía circular, de tal modo que todo pueda reutilizarse y sirva, por tanto, para que un ecosistema productivo sea sostenible y energéticamente eficiente”.
Con 6.000 hectáreas y 1.250 comuneros, la Comunidad de Regantes Santa María Magdalena abarca los términos municipales de Mengíbar, Jaén y Cazalilla. Esta planta, autorizada para autoconsumo y venta de excedentes dispone de dos transformadores de 3.500 kwa y puede suponer una reducción en la factura de la luz de hasta un 40%. El presidente del colectivo, Eduardo Díaz, ha subrayado la conveniencia de la construcción de esta planta fotovoltaica en una zona especialmente problemática por la altitud manométrica con la que llega el agua, siendo una de las más altas de toda Andalucía, lo que suponía una dificultad añadida que se verá solventada a través de esta iniciativa.