En los últimos años, Renfe ha experimentado una profunda transformación digital que ha tocado cada rincón de su organización, desde la optimización de sus operaciones hasta la modernización de sus servicios al cliente.
Los Centros de Competencia Digital forman parte de esta estrategia de transformación digital con el objetivo de posicionar a Renfe como un referente de innovación tecnológica en el sector ferroviario. Nacen para poder internalizar y trasladar parte de los servicios centrales de Renfe Operadora a localidades de baja densidad demográfica, en las que, además, dispone de espacios que pueden actualizarse para crear sedes de trabajo con las últimas tecnologías del mercado y en enclaves de especial relevancia ferroviaria.
Además de ser motores de este cambio tecnológico, estos centros han desempeñado un papel crucial en la promoción de la diversidad e inclusión, con un enfoque particular en el impulso de la igualdad de género. Los centros de competencia digital brindan una gran oportunidad de empleo a las mujeres de entornos de menor densidad poblacional, ofreciéndoles una oportunidad de empleo estable y herramientas para avanzar en sus carreras dentro de un entorno tecnológico en constante evolución.
Renfe cuenta en la actualidad con siete Centros de Competencias Digitales que permiten a la operadora descentralizar servicios tecnológicos y crear empleo de calidad. Se encuentran instalados en Teruel, Alcázar de San Juan (Ciudad Real), Miranda de Ebro (Burgos), Mérida (Badajoz), Linares (Jaén), Monforte de Lemos (Lugo) y Portbou (Girona).
El número de mujeres trabajadoras en estos centros es significativo y supone un elevado porcentaje, por ejemplo, en Linares donde representan el 69% de la plantilla o en el de Mérida, con un 58%, seguido del centro ubicado en Monforte de Lemos, donde se alcanza el 36% de mujeres en la plantilla.
Cada centro está especializado en un ámbito de innovación y servicio al cliente concreto. El CCD de Teruel se encarga del funcionamiento, mantenimiento y control de la plataforma tecnológica de la compañía; en el de Alcázar de San Juan se abordan proyectos de robótica e inteligencia artificial; el de Miranda de Ebro está destinado a la gestión de aplicaciones; los centros de Linares y de Mérida son específicos para la atención al cliente; en Monforte de Lemos se trabaja en ciberseguridad, y el centro de Portbou se ocupa de controles de calidad y pruebas.