Manuel Fernández detalla que “hemos considerado conveniente reforzar la vigilancia y los controles específicos durante los días que se produce una mayor presencia de personas que quieren disfrutar de un festejo muy arraigado en la comarca”.
“La prioridad es que esta festividad siga siendo ejemplo de convivencia y cordialidad entre vecinos y forasteros, sin que la diversión sea sinónimo de alteración del orden público”.
El alcalde señala que estas fiestas patronales que “son un reclamo comarcal ya que atraen a muchas vecinas y vecinos de los pueblos vecinos por lo que Arjonilla llega a duplicar la población”.