El alcalde y concejal de Hacienda y Patrimonio, Marino Aguilera, ha presentado junto a la edil de Urbanismo, Obras y Servicios, Mercedes Flores, la última línea de ayudas que recoge el Plan REAL, puesto en marcha durante el estado de alarma para la recuperación económica y social de Alcalá. Se trata de subvenciones destinadas a la rehabilitación, conservación y mejora de accesibilidad y eficiencia energética de viviendas en el casco histórico, casco antiguo y aldeas.
“Damos cumplimiento a otra medida del programa de gobierno: ofrecer a la ciudadanía facilidades y recursos para la rehabilitación de viviendas. Lo hacemos a través del PEPRICH (Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Casco Histórico), con unas bases reguladoras que son pioneras en el Ayuntamiento de Alcalá la Real, dotadas de una partida de 50.000€ este año y que el que viene se repetirá con otros 50.000€” ha explicado el alcalde.
El objetivo, además de ayudar a rehabilitar inmuebles de la localidad, es servir de apoyo a empresas de energía y de construcción, pues, según Aguilera, “está claro que este dinero que ponemos a disposición de los alcalaínos para que inviertan en sus viviendas va a recalar en todas esas empresas”.
Dichas ayudas se dividen en tres líneas principalmente:
1- Conservación y rehabilitación. En el caso de fachadas y medianeras, se subvenciona hasta el 80%, mientras que en el caso de cubiertas y azoteas, cubre hasta un 60%.
2- Accesibilidad. (Supresión de desniveles para el acceso a personas con algún tipo de limitación, sustitución de bañera por plato de ducha… etc)
3- Construcción sostenible. Se va a valorar la apuesta por la eficiencia energética, el ahorro, el aislamiento de fachadas, o la renovación de carpintería. Se subvencionará hasta un 40%.
Habrá un plazo de 30 días desde la publicación de estas bases en el BOP, para recibir solicitudes y dos meses para evaluarlas. El modelo de solicitud, al que habrá que adjuntar el presupuesto, se colgará en la web del Ayuntamiento la semana próxima, una vez salgan públicadas las bases en el Boletín Oficial de la Provincia.
La edil de Urbanismo ha adelantado que, “una vez concedida la ayuda, se dispondrá de tres meses para ejecutar la mejora y de un mes para justificar esta. A la hora de valorar las solicitudes, se tendrán en cuenta cuestiones como que sea la residencia habitual, que en la vivienda haya personas con discapacidad superior a un 33%, que sean familias numerosas, o que se encuentren en situación de desempleo”.