Niños y niñas de educación infantil han protagonizado los actos de apertura de la Semana de la Infancia, organizada por el Ayuntamiento alcalaíno a través de las áreas de Educación y Participación, Servicios Sociales e Igualdad y Cultura y Juventud. Un pasacalles y la lectura de manifiestos por parte de los niños han servido para abrir unos intensos días de actos.
En la charanga inaugural han tomado parte escolares de los centros Martínez Montañés, SAFA, Cristo Rey, Alonso Alcalá y José Garnica. Lo han hecho con camisetas contra la violencia de género- en la semana del 25N- y reivindicando la igualdad.
María José Aceituno, concejala de Servicios Sociales e Igualdad ha explicado que “este acto inaugura la Semana de la Infancia en el día internacional, que este año se centraliza en Alcalá la Real a nivel provincial, tras la decisión de la Delegación provincial de Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía”.
Por otro lado, ha indicado que “el Ayuntamiento tiene el firme convencimiento de que hay que apostar por los derechos de la infancia y desde los Servicios Sociales trabajamos con este objetivo todos los días. Se vela por el bienestar de la familia, colaboramos con los centros educativos con un programa de absentismo, tenemos una escuela creativa, trabajamos con educación con el programa de escuelas de familias, y también desde educación se apostó por una metodología innovadora de educación de 0 a 3 años”.
Posteriormente un grupo de niños y niñas se han encargado de leer el siguiente manifiesto:
El 20 de noviembre de 1989, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Convención sobre los Derechos de la Infancia. Es el primer tratado internacional, que reúne los derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales de todos los niños y niñas del mundo. Es el tratado internacional más firmado y ratificado en la historia de la humanidad.
Con motivo de este aniversario, nosotros, en representación de nuestros compañeros y compañeras de los colegios de Alcalá y las Aldeas, queremos alzar nuestras voces, porque todos los niños y niñas tenemos voz, rostro y nombre, para que todos podamos vivir con dignidad.