La elección de este ejemplar arbóreo se debe a su rápido crecimiento, su amplia copa que proporciona una sombra densa y la ausencia de frutos, lo que evita posibles molestias y manchas en la zona.
“Esperamos que en los próximos años, estas moreras ofrezcan una sombra considerable, convirtiendo la zona de recreo de la piscina en un espacio aún más confortable y disfrutable para todos”, ha indicado el concejal de Medio Ambiente, José María Cano