El concejal de Mantenimiento Urbano, Javier Padorno, explica que en la calle Obispo Alonso Suárez se están cambiando las baldosas por otras podotáctiles, diseñadas para que sean fácilmente reconocibles por las personas con discapacidad visual; “también se rebajan los bordillos para que sean completamente accesibles, así como la reparación de todos los alcorques que hay en la misma y que estaban deteriorados por estacionamientos indebidos de vehículos”.
“Suponen un complemento a los trabajos diarios que se llevan a cabo en la ciudad para mantener y conservar las calles y acerados, sumando medidas de accesibilidad para conseguir que nuestros barrios cuenten con itinerarios accesibles para personas con discapacidad”, ha resaltado el edil.