La subdelegada del Gobierno de España en Jaén, Catalina Madueño, ha valorado la buena integración de las personas que gozan del estatus de refugiado y que están residiendo en el centro de acogida gestionado por la Fundación Diaconía en Rus, gracias al programa del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Así lo ha destacado durante la visita a este recurso, en el que ha estado acompañada por el alcalde del municipio, Manuel Hueso y el jefe de la Dependencia de Trabajo e Inmigración de la Subdelegación, Pedro Garrido, así como por la directora del proyecto nacional de acogida de esta ONG, Concha Rodríguez, y el director de las instalaciones, Pablo Gómez. “La injusta y terrible invasión de Rusia, hace ya dos meses, provocó que millones de ucranianos tuvieran que abandonar sus casas y huir de la guerra. Desde el primer momento, nuestro país ha mostrado su compromiso y su solidaridad con esas personas, dando un ejemplo de hospitalidad y auxilio”, ha explicado la representante del Ejecutivo.
Al respecto, la subdelegada ha recordado que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones tiene abierto un Programa de Protección Internacional, con el objetivo de cubrir las necesidades de las personas refugiadas. “Esta iniciativa se desarrolla en todo el territorio nacional a través de distintas organizaciones no gubernamentales. En Jaén, Cruz Roja es la principal asociación designada en la provincia por el Ministerio de Inclusión para la atención y acogida de desplazados que llegan a la provincia. Sin embargo, hay otros colectivos como Jaén Acoge y la Fundación Diaconía que ha puesto en marcha recursos para atender a las familias desplazadas”.
En este sentido, Catalina Madueño ha puesto en valor el trabajo y la dedicación de estas ONG,s para conseguir que los desplazados ucranianos se sientan “lo mejor posible mientras estén entre nosotros”. La subdelegada ha visitado las instalaciones del centro de acogida de Diaconía en Rus, ubicado en un edificio dedicado con anterioridad al tratamiento de personas con adicciones, que tiene una capacidad total de 36 plazas. “Se habilitaron a finales a mediados de marzo y fue el 1 de abril cuando llegaron las primera familias al municipio. Actualmente, en el centro residen 24 personas, de las que 13 son menores de edades comprendidas entre los 13 y los 17 años. El perfil principal de las familias es el compuesto por una madre con niños pequeños a su cargo”, ha especificado.